Ternium, en colaboración con la Asociación de las Empresas del Distrito Industrial de Santa Cruz (AEDIN) y Organosolo, donará 30 toneladas de abono orgánico desarrollado a partir de los residuos generados en las operaciones industriales para los agricultores locales de Santa Cruz e Itaguaí. La iniciativa forma parte del programa “Cooperación Circular”, que cuenta con el apoyo de EMATER-RIO, entidad del Gobierno del Estado de Río.
El programa inició este martes 8, es una acción alineada a la agenda Rio2030 y a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU. El evento contó con la presencia de Vinícius Farah, Secretario del Desarrollo Económico del Estado; Fernanda Candeias, Gerente de Relaciones con la Comunidad de Ternium; Pamela Reis, Gerente de Medio Ambiente de Ternium; Cristina Galiazzi, Gerente de Operación y P&D de coproductos de Ternium; Francisco de Souza Dantas, socio director de Organosolo, además de los representantes de otras empresas que integran AEDIN y de agricultores en la región.
Durante el proyecto piloto, Organosolo donará 2,500 kg de abono por mes para ponerlo a disposición de los agricultores de Santa Cruz e Itaguaí. Por otro lado, Ternium donará a Organosolo 400 toneladas por mes de Cal Hidratada de FGD para el desarrollo de nuevos productos agrícolas. El Memorándum de Entendimiento entre las partes tiene un plazo de 12 meses.
“Nuestra meta en el futuro es involucrar a más empresas del Distrito Industrial de Santa Cruz en este proceso, ampliando la distribución de residuos y coproductos industriales para beneficiar la comunidad local. Queremos ser protagonistas de iniciativas de la economía circular en la región”, afirma Fernanda Candeias, presidente de AEDIN y Gerente de Relaciones con la Comunidad de Ternium. AEDIN cuenta con 14 empresas en el Distrito Industrial de Santa Cruz como Ternium, Gerdau y la Casa de Moneda.
“En Ternium desarrollamos estrategias de manera continua para maximizar el uso de coproductos y así reducir la generación de residuos. La importancia del uso de coproductos como alternativas sustentables son fundamentales para la promoción de la economía circular en la cadena de valor del acero”, destaca Pamela Reis, Gerente de Medio Ambiente de Ternium.
La Gerente de Operación e I&D de coproductos de Ternium, Cristiane Galiazzi, explica que hay un desafío constante de reutilizar los residuos y coproductos generados en la producción del acero, los cuales se pueden utilizar en el reciclaje interno, o bien, para su uso en otros sectores. En febrero, Ternium acordó la donación de 40 mil toneladas de agregado siderúrgico para la obra de la Alcaldía de Río de Janeiro que recuperará las vías de acceso del Distrito Industrial de Santa Cruz.
“Esta es otra aplicación de la economía circular que buscamos en Ternium, uniendo la actividad productiva al desarrollo para la sociedad, con el apoyo a la comunidad local y reforzando la estrategia de reutilización y sostenibilidad para la empresa”, afirma Cristiane Galiazzi.
El programa es una acción alineada a la agenda Río 2030 y a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU.
Para el secretario de Desarrollo Económico del Estado, Vinicius Farah, Ternium reúne un concepto moderno en una sola acción, que es el crecimiento económico circular, el uso de recursos naturales con un enfoque en la reducción de residuos y contaminación, el desarrollo económico local y la transformación positiva en la vida de las personas. “Este tipo de iniciativas están completamente alineadas al Río de Janeiro que el Gobierno del Estado viene consolidando en los últimos meses”, dijo.
El socio director de Organosolo afirmó que el desarrollo de nuevos productos agrícolas a partir del uso de cal hidratada para la producción de abonos orgánicos podrá contribuir enfáticamente en el aumento de la productividad y calidad de los cultivos. Por otro lado, EMATER-RIO ofrecerá apoyo para que los agricultores usen los productos de forma adecuada. Además, la organización también es responsable de las pruebas realizadas.
El abono orgánico se desarrolla a partir de residuos generados en las actividades industriales de Ternium.
“Desde 2020, observamos resultados alentadores de algunos agricultores que utilizaron el acondicionador de suelo y fertilizante en cultivos de hortalizas, tales como la mostaza, lechuga, col y cebollín. Además del aumento en la productividad, la buena apariencia de las hojas llamó bastante la atención y eso es un incentivo para que probemos el producto en otros cultivos y con otros agricultores”, dijo Magno dos Santos Roza", Técnico en Agropecuario de EMATER-RIO en Itaguaí y Zootecnista egresado de la Universidad Federal Rural de Río de Janeiro (UFRRI)."
El agricultor local Luis Antonio Morisco dos Santos de 40 años, dueño de una finca de aproximadamente 12 hectáreas en Piranema (área rural de Itaguaí), casado y padre de 4 hijos, espera aumentar su producción con el uso del abono que el programa "Cooperación Circular" donará. Siembra okra, yuca, calabaza, calabacín, frijol y camote. Su producción es destinada a la merienda escolar de escuelas municipales, además de mercados y empresas locales. "El abono mejorará nuestro suelo. Por ejemplo, en lugar de esperar 1 año para la cosecha de yuca, el agricultor puede recolectarla de 7 a 8 meses. Y cargará más cajas con un producto mejor», dijo, agregando que el uso de abono puede hasta triplicar la producción.