¿Qué tienen en común un tanque de gas, las herramientas que utiliza un agricultor, el ferrocarril que atraviesa la Sierra Tarahumara y las balatas que necesita para frenar el auto en que te trasladas de un lugar a otro?
En cada uno de estos casos, al igual que en muchos otros, está presente la lámina negra como materia prima, una aleación de hierro con carbono que produce Ternium, y se obtiene a través de un proceso termomecánico que implica la deformación del acero, hasta alcanzar dimensiones y propiedades mecánicas requeridas.
En su estado natural, la lámina negra es una hoja delgada, lisa y de forma rectangular que se caracteriza, principalmente, por su resistencia y bajo costo, dos cualidades que hacen de ella un producto de alta demanda, sobre todo para aplicaciones que no requieran de acero galvanizado.
Su nombre responde a la coloración oscura y opaca que tiene inicialmente, aunque luego puede ser sometida a un proceso de pintura y adquirir otros tonos y cualidades. Hay que tener en cuenta que la lámina negra no pasa originalmente por ningún proceso de recocido ni templado.
La lámina negra es una hoja delgada, lisa y de forma rectangular que se caracteriza por su resistencia y bajo costo, para aplicaciones que no requieran de acero galvanizado.
Resistencia y versatilidad, sus dos atributos principales
Para ampliar su potencial y aplicaciones, la lámina negra que fabrica Ternium puede pasar, posteriormente, por un tratamiento de decapado, es decir, un proceso de limpieza del óxido a base de ácido clorhídrico y otras sustancias. Esto da como resultado un acero muy limpio y en las condiciones óptimas para recibir una capa de pintura o algún otro tipo de recubrimiento que le dé otras cualidades y lo haga apto para funciones muy específicas.
Un ejemplo de lo anterior se puede encontrar en los invernaderos, para lo cual se utiliza lámina negra revestida, luego de pasar por un proceso de limpieza y galvanizado.
Por su versatilidad, la lámina negra tiene diversos usos en distintas industrias, entre las que destacan la automotriz –y de transporte en general–, línea blanca, agrícola, así como el sector de la construcción. Lo mismo sirve como base para la fabricación de estructuras residenciales como para hacer tuberías, autopartes, todo tipo de maquinaria y hasta barandales.
También es importante apuntar que este producto cuenta con distintas versiones según el calibre (de 1 milímetro a 1 pulgada de espesor con el nuevo molino caliente) y los grados de acero, de manera que podemos hablar de aceros comerciales, estructurales, de alta resistencia, de conformabilidad mejorada y troquelables, entre otros.
Ternium ofrece lámina negra en un amplio rango dimensional y de grados de acero para satisfacer las necesidades específicas de sus clientes.