Nakarys Jhoana Escorcia, habitante del Municipio de Palmar de Varela, recuerda con alegría la primera convocatoria que hizo la compañía en su municipio para trabajar en la nueva planta. Los interesados tenían la oportunidad de capacitarse con el SENA (Servicio Nacional de Aprendizaje) y postularse posteriormente a los cargos vacantes que se fueran abriendo a medida que avanzaba el proyecto.
“La primera convocatoria a las capacitaciones se hizo en un colegio del municipio en el 2018. No pude asistir porque estudiaban en el día y estaba trabajando. Mi oportunidad llegó en 2019, cuando se abrió el horario nocturno. Fueron dos años de preparación en los que aprendí sobre movimiento preventivo, hidráulica, metrología, matemáticas, entre otros temas”, afirma Nakarys.
Luego de pasar todas las entrevistas y el proceso de selección, ingresó en enero de 2020 al proyecto, como Auxiliar de Bodega en el área de Logística. Un año después, ya había sido vinculada directamente a la empresa y fue promovida al área de Operaciones, al cargo de Operador SAP de Laminación.
“Ha sido una experiencia maravillosa, he aprendido muchas cosas que no sabía. Es muy bonito el plan carrera que tiene la compañía porque nos da la oportunidad de crecer todo el tiempo, aquí estamos en capacitación continua. Son muchas las oportunidades que brinda la empresa”, dice.
Esta joven, cabeza de familia, Técnica en Ventas y Tecnóloga en Distribución Física Internacional, desde muy joven ha trabajado para sacar adelante a su hijo de cuatro años, con el apoyo de su mamá y de su hermano, con quienes vive en Palmar de Varela.
“Con la pandemia, mi mamá que trabajaba por días en labores domésticas se quedó sin trabajo. Gracias a mis ingresos pudimos sostener el hogar. Además, este trabajo me ha dado la posibilidad de brindarle un mejor futuro y calidad de vida a mi hijo que es lo más importante para mí”, agrega.
Nakarys asegura que, a pesar de ser tímida, el trabajo en el proyecto le ha permitido abrirse, compartir con otras personas, tener una mentalidad más amplia de las cosas, aprender de los procesos desde diferentes áreas y participar en distintas etapas del proyecto. Sus compañeros de Logística le decían ‘la hormiguita’, por su laboriosidad.
Ahora que cumplió un sueño para muchos jóvenes de Palmar, trabajar en la nueva planta de Ternium, planea alcanzar una nueva meta: convertirse en Tecnóloga en Financias y Negocios Internacionales, con el ánimo de seguir creciendo en la compañía.